Rueda de Prensa 40 aniversario del 4D

01/12/2017
Álora

En la mañana del viernes, 1 de diciembre, han comparecido en rueda de prensa nuestro Secretario General, José Sánchez Moreno, además de Secretario de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Eco-Socialismo del Psoe de Málaga, junto a Francisco Vargas Ramos, parlamentario andaluz del Partido Socialista, para hablar del 40 aniversario del 4D. También han asistido compañeros y compañeras de la Ejecutiva Municipal de Álora.

Las consecuencias del 4 de Diciembre fueron más allá de esta tierra. Andalucía revolucionó el desarrollo del Estado de las Autonomías. La movilización ciudadana en las calles en 1977 y en las urnas en 1980 cambió para siempre la configuración territorial de este país, poniendo rumbo a un Estado de las Autonomías más justo, más equilibrado, más igualitario para las personas que el que concibieron los artífices de la Constitución y la democracia actual. La muerte de García Caparrós fue uno de los hitos de la lucha por la autonomía en la Transición y se produjo el mismo día en que dos millones de andaluces salieron a las calles para reclamarla.

Andalucía fue el freno a que hubiera una España de dos velocidades. Y todo se hizo en el marco del respeto más estricto a las reglas del juego democrático y a la idea misma de España como proyecto común de todos los ciudadanos y ciudadanas de este país. Andalucía supo abanderar una reivindicación que era buena para todos y todas.

Fuimos la única Comunidad que accedió a la autonomía a través del artículo 151 de la Constitución. Fuimos capaces de conseguir algo muy grande: cambiar la historia, y cambiarla en beneficio del pueblo andaluz, destrozando el rumbo que la derecha tenía escrito para Andalucía.

Sin Andalucía y su posición en aquel momento no se podría entender el discurrir posterior del Estado autonómico. Un proceso en el que resultó determinante el papel de los ayuntamientos y las diputaciones, especialmente a partir de las elecciones democráticas de 1979.

Aunque algunos pretendan ahora reescribir la historia, el proceso autonómico andaluz no contempló en ningún momento ni se basó en un derecho de autodeterminación. Para nada estaba involucrada aquí la soberanía, sino el nivel de autonomía en el marco constitucional.

Irresponsablemente, algunas formaciones políticas han presentado, en las últimas semanas, el referéndum de acceso a la autonomía como ejemplo de ejercicio del derecho de autodeterminación. En ningún caso lo fue. Causa sorpresa y estupor una notoria tergiversación la de historia como esa.

El de 1980 en ningún caso fue un referéndum de autodeterminación: quien así lo afirma está manipulando la voluntad de miles y miles de andaluces y andaluzas que con libertad y valentía salieron a la calle y acudieron a las urnas para exigir autonomía plena para Andalucía en una España de iguales.

Los y las socialistas hemos demostrado a lo largo de estas cuatro décadas -también cumplimos 40 años como federación andaluza- nuestra conexión y vínculo con la ciudadanía y nuestra capacidad de impulsar el progreso y el desarrollo de Andalucía, de asumir y liderar los cambios en esta tierra.

Los socialistas estábamos con la gente en la calle aquel 4D y en las urnas el 28F. Y los socialistas seguimos estando con la gente de esta tierra, codo con codo, trabajando, dejándonos la piel y movilizando a esta tierra para que llegue a lo máximo. Somos los mismos: los socialistas de Andalucía, el PSOE andaluz.

Ahora toca reformar la Constitución y revisar la configuración territorial y a Andalucía le toca, y va a jugar, el mismo papel de hace 40 años: reafirmar los principios de unidad de España, reconocimiento a los hechos diferenciales, cohesión social y territorial e igualdad de todos los ciudadanos vivan donde vivan.

Rememoramos aquel 4D para recordar a los andaluces y andaluzas lo que conquistaron, una Andalucía con plena autonomía y autogobierno, y para volver a movilizar a la ciudadanía en defensa de esta tierra y de la igualdad en el nuevo modelo territorial que se avecina.

Reivindicamos la ilusión del 4D y el espíritu del 28F para que los andaluces y andaluzas se impliquen: queremos que Andalucía levante de nuevo, con fuerza, unidad y compromiso, la bandera de la igualdad en el debate territorial.

Igualdad y respeto a las singularidades de todos los territorios, que expresan la riqueza de la pluralidad de España. En el Estado federal al que aspiramos tenemos que estar y mantenernos unidos en la diversidad.